Valcárcel: “La primavera árabe no debe quedar en una esperanza”

Islam en Murcia - 12.05.17
Fuente: Grupo PPE

Valcárcel y Jhinaoui (foto: Grupo PPE)
El Vicepresidente del Parlamento Europeo y eurodiputado del PP, Ramón Luis Valcárcel, afirmó en Bruselas que “la Unión Europea debe contribuir a que la primavera árabe no quede sólo en una esperanza”, manifestando la disposición de la Eurocámara a “seguir trabajando intensamente con Túnez y con todos los actores de la sociedad civil para ayudar a la consolidación de las instituciones democráticas establecidas por la nueva Constitución”.

Durante una reunión mantenida con el Ministro de Asuntos Exteriores de Túnez, Khemaies Jhinaoui, Valcárcel aseguró que “Túnez cuenta con el apoyo total de la UE en su lucha contra el terrorismo”, lamentando el “inmenso sufrimiento” al que ha sido sometida la sociedad tunecina por “el yugo yihadista” en los últimos años, así como las consecuencias económicas que de él se han derivado (caída del turismo del 36% y freno a la inversión, que en el período 2015-2016 se limitó al 2% del PIB).

El Vicepresidente reconoció que “desde los atentados en el Museo Nacional del Bardo  se ha venido abajo el turismo, que empezaba a despuntar”.

Asimismo, señaló que “la primavera árabe, tan salpicada de obstáculos, no ha hecho sino generar una cierta frustración en una juventud que está bien preparada, pero que no encuentra el camino del empleo”, haciendo referencia así a la situación de paro a la que se enfrenta el 30% de los jóvenes licenciados.

En este sentido, Valcárcel confirmó al Ministro que “el Parlamento Europeo tiene toda la voluntad de poner la diplomacia económica comunitaria al servicio del crecimiento y de la creación de empleo en Túnez”, como ya ha manifestado en reiteradas ocasiones el Presidente de esta institución, Antonio Tajani. Agradeciendo este compromiso, el Ministro pidió que se reconozca más ampliamente el carácter especial que define a las relaciones entre la UE y Túnez.

Este modelo de diplomacia servirá, como indicó el Vicepresidente, para “aliviar el desempleo y ofrecer nuevas perspectivas económicas, de calidad y de futuro, a las diferentes ciudades y regiones de Túnez”. Defendió, asimismo, la importancia de que el país siga realizando esfuerzos para lograr un mayor equilibrio macroeconómico, puesto que éste le ayudará a seguir avanzando en las reformas institucionales.

Asimismo, el Vicepresidente mostró su preocupación por la situación de inestabilidad que atraviesa Libia y por cómo ésta afecta a su vecino Túnez, admitiendo que “contribuye a acentuar el problema del yihadismo” y destacando la dificultad de controlar “la porosidad de la frontera” que se extiende entre ambos países. La UE rechaza, en todo caso, la ley 22/2015 sobre la lucha contra el terrorismo de Túnez, puesto que prevé la pena de muerte.

En todo caso, Valcárcel aplaudió también “los esfuerzos de Túnez en la contribución a la solución pacífica del conflicto libio”. Y es que, según dijo el Ministro tunecino, “si Libia encontrara el camino de la paz, ello mitigaría los efectos del terrorismo”.

Sobre asuntos migratorios, el eurodiputado del PP también agradeció “la hospitalidad que los tunecinos vienen mostrando al acoger a los refugiados libios” y dejó constancia del deseo de la Eurocámara de que los Estados Miembros abran “nuevas vías de migración legal” para países socios “tan importantes como Túnez”.

En su condición de Vicepresidente de la Eurocámara, Valcárcel tomó parte en el encuentro en representación del Presidente Tajani. A él acudió el Ministro Jhinaoui acompañado por una delegación del Gobierno tunecino. Éste se encontraba en Bruselas con ocasión del Consejo de Asociación celebrado el 11 de mayo, en el que se trataron los temas prioritarios del partenariado UE - Túnez (apoyo al desarrollo socioeconómico y a las relaciones comerciales, asociación para la juventud y asuntos relativos a la migración y la movilidad).

La visita se produce justo después de tuviera lugar la Semana de Túnez en el Parlamento Europeo, cuyo objetivo fue apoyar y reforzar las capacidades del Parlamento tunecino, sobre todo de cara a sus desafíos políticos, de seguridad y económicos.

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