Fuente: La Opinión de Murcia (25/1/2011)
Renovación y Unión de España (PRUNE) dice que no quiere reconquistar Al-Andalus, pero propone "la regeneración moral y ética desde el Islam"
El Partido Renacimiento y Unión de España (PRUNE), que se define como de «inspiración islámica», quiere presentar candidaturas en la Región de Murcia en las próximas elecciones municipales del 22 de mayo.
Así lo confirmó el presidente y portavoz nacional del partido, Mostafa Bakkach El Aamrani, quien precisó que el próximo 30 de enero habrá una reunión de los delegados de la formación en toda España para concretar un plan de acción para los comicios.
El PRUNE tiene tres objetivos fundamentales, según manifiesta su presidente nacional. El primero consiste en «alcanzar las más altas cotas de participación de la ciudadanía española en todos los ámbitos de decisión política, y en especial de los más desfavorecidos por su condición de minorías a las que se marginan o pretende marginar». El segundo, «apoyar políticas dirigidas a potenciar y desarrollar principios como los de la justicia, la igualdad, la solidaridad y la libertad sin más limitaciones que las naturales».
El tercer objetivo puede levantar más polémica: «El PRUNE tendrá en cuenta al Islam en su actuación política, considerándolo como factor determinante para la regeneración moral y ética de la sociedad española. Las prácticas usurarias en las transacciones comerciales y el interés bancario, entre otras cosas, no tendrán cabida en una sociedad gobernada por el PRUNE». No obstante, el partido islámico garantiza que gobernaría «desde el más absoluto respeto y acatamiento de la Constitución de 1978 y la normativa legal vigente en España».
El partido cuenta con 700 afiliados en todo el país y, según indica su portavoz nacional, no es una formación exclusiva de ciudadanos musulmanes. «No es necesario ser musulmán para formar parte del partido, estamos abiertos a cristianos, judíos y gente sin creencias», explica Mostafa Bakkach, que reconoce sin embargo que la mayoría de militantes con los que cuenta ahora mismo la organización proceden de
países árabes. «No somos extremistas ni estamos teledirigidos por ningún gobierno ni ningún otro movimiento religioso. Solo somos un grupo de ciudadanos, españoles porque vivimos en España, que queremos luchar por los derechos de las minorías», dice Bakkach, quien descarta que entre los fines del PRUNE «esté la reconquista de Al-Andalus o cosas de ese tipo. Lo único que queremos es que cristianos, judíos, musulmanes y ateos convivan en libertad y tolerancia».
La formación se fundó en 1999 en Granada (curiosamente, el último reino islámico que hubo en la Península Ibérica) y, además de en Murcia, cuenta con delegaciones en Málaga, Ceuta, Cádiz, Toledo, País Vasco y Asturias. Pronto abrirá sedes en Barcelona, Gerona, Ceuta y Valencia.
Para los comicios de 2011 no tienen esperanzas de conseguir representación en las instituciones, sino que pretenden que las elecciones del 22 de mayo sirvan a sus militantes para adquirir experiencia y familiarizarse con el sistema político español. Para 2015, fecha de las próximas municipales, el PRUNE confía en entrar en los ayuntamientos. «No queremos correr. El objetivo no es ganar en 2011, es participar, formar a nuestra gente, y darnos a conocer a la sociedad», aseveró Bakkach.
Renovación y Unión de España (PRUNE) dice que no quiere reconquistar Al-Andalus, pero propone "la regeneración moral y ética desde el Islam"
El Partido Renacimiento y Unión de España (PRUNE), que se define como de «inspiración islámica», quiere presentar candidaturas en la Región de Murcia en las próximas elecciones municipales del 22 de mayo.
Así lo confirmó el presidente y portavoz nacional del partido, Mostafa Bakkach El Aamrani, quien precisó que el próximo 30 de enero habrá una reunión de los delegados de la formación en toda España para concretar un plan de acción para los comicios.
El PRUNE tiene tres objetivos fundamentales, según manifiesta su presidente nacional. El primero consiste en «alcanzar las más altas cotas de participación de la ciudadanía española en todos los ámbitos de decisión política, y en especial de los más desfavorecidos por su condición de minorías a las que se marginan o pretende marginar». El segundo, «apoyar políticas dirigidas a potenciar y desarrollar principios como los de la justicia, la igualdad, la solidaridad y la libertad sin más limitaciones que las naturales».
El tercer objetivo puede levantar más polémica: «El PRUNE tendrá en cuenta al Islam en su actuación política, considerándolo como factor determinante para la regeneración moral y ética de la sociedad española. Las prácticas usurarias en las transacciones comerciales y el interés bancario, entre otras cosas, no tendrán cabida en una sociedad gobernada por el PRUNE». No obstante, el partido islámico garantiza que gobernaría «desde el más absoluto respeto y acatamiento de la Constitución de 1978 y la normativa legal vigente en España».
El partido cuenta con 700 afiliados en todo el país y, según indica su portavoz nacional, no es una formación exclusiva de ciudadanos musulmanes. «No es necesario ser musulmán para formar parte del partido, estamos abiertos a cristianos, judíos y gente sin creencias», explica Mostafa Bakkach, que reconoce sin embargo que la mayoría de militantes con los que cuenta ahora mismo la organización proceden de
países árabes. «No somos extremistas ni estamos teledirigidos por ningún gobierno ni ningún otro movimiento religioso. Solo somos un grupo de ciudadanos, españoles porque vivimos en España, que queremos luchar por los derechos de las minorías», dice Bakkach, quien descarta que entre los fines del PRUNE «esté la reconquista de Al-Andalus o cosas de ese tipo. Lo único que queremos es que cristianos, judíos, musulmanes y ateos convivan en libertad y tolerancia».
La formación se fundó en 1999 en Granada (curiosamente, el último reino islámico que hubo en la Península Ibérica) y, además de en Murcia, cuenta con delegaciones en Málaga, Ceuta, Cádiz, Toledo, País Vasco y Asturias. Pronto abrirá sedes en Barcelona, Gerona, Ceuta y Valencia.
Para los comicios de 2011 no tienen esperanzas de conseguir representación en las instituciones, sino que pretenden que las elecciones del 22 de mayo sirvan a sus militantes para adquirir experiencia y familiarizarse con el sistema político español. Para 2015, fecha de las próximas municipales, el PRUNE confía en entrar en los ayuntamientos. «No queremos correr. El objetivo no es ganar en 2011, es participar, formar a nuestra gente, y darnos a conocer a la sociedad», aseveró Bakkach.
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