Uno de los saharauis muertos en El Aaiún era español y vivió en Alguazas

Fuente: laverdad.es, 12.11.10

Los disturbios del pasado lunes tras el asalto de las fuerzas de seguridad marroquíes al campamento de protesta de El Aaiún se cobraron la vida de un ciudadanos de nacionalidad española, que residió en Alguazas y tiene familia en Alicante. La Coordinadora de Amistad con el Pueblo Saharaui de la provincia de Alicante confirmó ayer que una de las víctimas mortales es Baby Hamday Buyema, nacido en El Sáhara cuando pertenecía a España y que, por tanto, tenía nacionalidad española. Fuentes de la delegación de esta ONG en la provincia de Alicante, señalaron que el hermano del fallecido reside en Alicante donde, según las mismas fuentes, podría estar empadronado Baby Hamday Buyema.

El fallecido nació hace 35 años en El Aaiún, cuando aún era territorio español, estaba casado y tenía dos hijos de corta edad, un niño de cuatro años y una niña de dos. Lehmad ha indicado que su hermano obtuvo el documento nacional de identidad español este verano, en agosto, en una comisaria de Murcia. También relató que vivió en Alguazas algún tiempo.

El hermano del finado explicará hoy viernes a los medios de comunicación las circunstancias de la muerte de Baby Hamday Buyema durante una rueda de prensa que se celebrará en la sede de UGT en Alicante. No obstante, ayer ya trascendió cómo sucedieron los hechos que le costaron la vida a Baby Hamday Buyema. En declaraciones a 'elmundo.es', el hermano del fallecido explicó que Baby iba en un autobús de la empresa minera para la que trabajaba como ingeniero desde hacía más de 12 años. Al parecer, según la versión de Lahmad, el vehículo fue interceptado en El Aaiún por la Policía. Baby, único saharaui que viajaba en el autobús, fue obligado a bajar y fue atropellado con uno de los furgones de la policía, «que pasó varias veces por encima de su cuerpo cuando se encontraba tendido», afirmó ayer Lahmad. Según Lahmad, «la ambulancia tardó cinco horas en llegar» y la agresión acabó con su vida. Su hermano tiene intención de viajar a El Aaiún desde Alicante para enterrarlo junto a su madre.

La vicepresidenta de la Asociación Saharaui de Víctimas de Violaciones Graves de los Derechos Humanos (ASVDH), Ghalia Djimi, aseguró ayer que «algunos de los arrestados ya están siendo liberados». Los que van saliendo cuentan «que han sido maltratados, y que había muchos detenidos, hombres y mujeres. Aunque no pudieron verlos, porque la mayoría tenía los ojos vendados, sí que pudieron escucharlos», afirmó la activista. Varias fuentes saharauis relataron, además, que «alrededor de 40 detenidos habrían sido llevados ayer ante el Tribunal de Primera Instancia de El Aaiún», aunque la información no ha sido, por ahora, confirmada por las autoridades marroquíes. La mayoría de los detenidos tras los enfrentamientos en las calles de El Aaiún el pasado lunes han sido llevados a la comisaría de policía de la ciudad, mientras que los que fueron arrestados en el asalto al campamento de protesta están arrestados en el cuartel de la Gendarmería, asegura la activista.

La República Árabe Saharaui Democrática (RASD), añadió ayer en un comunicado que los detenidos, que alcanzarían ya los 2.000, estarían siendo albergados también en una escuela de secundaria, en tres cuarteles del ejército, en dos espacios habilitados en un campo de fútbol y en la conocida como 'Cárcel Negra' de El Aaiún. Por ahora, Marruecos ha confirmado que hay 163 arrestados.

El ministro de la comunicación marroquí, Jalid Naciri, aseguró ayer en una rueda de prensa que las «decenas de de personas» que han sido detenidas en los últimos días son «criminales y no militantes saharauis». También aprovechó para calificar la cobertura que la prensa española está haciendo del conflicto en el Sáhara Occidental de «vergüenza e injuria al pueblo marroquí».

En cuanto al número de heridos, resulta muy difícil contrastar las cifras de manera independiente. Las RASD habla de 4.500, y Marruecos de 65. Todas las fuentes saharauis consultadas aseguran que los heridos no quieren ir al hospital por miedo a ser detenidos. «Hay muchos lesionados a los que la policía ha pegado en la misma puerta del hospital. Tanto a ellos como a los familiares que les acompañaban», sostiene una de estas fuentes. El Frente Polisario asegura que, en unas circunstancias similares se habría producido la muerte de un joven de nombre Ali Salem Lanzari. Según informó ayer la formación y varias fuentes saharauis, el chico habría sido herido durante los disturbios, y su familia decidió trasladarlo hasta Agadir para que recibiera tratamiento hospitalario, donde finalmente murió. Al cierre de esta edición había sido imposible contratar esta información con fuentes marroquíes. Las fuerzas de seguridad marroquíes invadieron el lunes el campamento de protesta de Gdaim Izik, acto que desencadenó los peores disturbios registrados en el Sáhara Occidental desde 1991.

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