Fuente: laopiniondemurcia.es (17/11/2010)El presidente del parlamento saharaui se reunió ayer con Valcárcel, que condenó "de la forma más contundente" los ataques de El Aaiún.
El presidente del parlamento saharaui lo dijo ayer bien claro: «Marruecos está cometiendo un auténtico genocidio sin testigos que puede desembocar en una guerra que desestabilice el norte de África y que afectará a España y al resto de Europa». Jatri Aduh, número dos del Gobierno saharaui, hizo estas declaraciones tras reunirse con el presidente de la Comunidad, Ramón Luis Valcárcel, en el palacio de San Esteban. Ambos comparecieron juntos en una rueda de prensa en la que el jefe del Ejecutivo murciano hizo «una condena de la forma más contundente a la violencia contra el pueblo saharaui, que está sufriendo lo indecible».
Aduh explicó que, diez días después de que las fuerzas de seguridad de Marruecos entraran al campamento protesta montado cerca de El Aaiún y lo desalojaran por la fuerza, aún no tienen noticias de los muertos que puede haber. «Marruecos no quiere testigos de la matanza étnica y por eso no deja que los periodistas entren. Tenemos muchas dificultades para saber lo que ocurre porque casi no hay comunicación con El Aaiún, porque el cerco a los saharauis sigue», afirmó, convencido de que «la tensión en la zona podría dar fácilmente paso a la vuelta de la tensión bélica a la zona».
En su visita a Murcia el líder saharaui exigió al Gobierno español «que asuma su responsabilidad con el Sáhara Occidental porque sigue siendo potencia colonizadora y administradora». De hecho, y en relación con la muerte de Baby Hamday, saharaui con nacionalidad español afincado en Alicante y con familiares en la Región, Aduh aseguró que no es el único español muerto puesto que «los saharauis se pueden considerar ciudadanos de una colonia española hasta que no se aclare la situación del Sahara Occidental, y son responsabilidad del Gobierno de España». Jatri Aduh, que también es portavoz de la comisión negociadora con Marruecos en la ONU, reconoció que esperaban «del Gobierno español una posición mucho más contundente y responsable». Aduh añadió que «los intereses de España con Marruecos no justifican que olvide sus obligaciones». Además, considera que la posición que España está tomando deja en evidencia al país por «los chantajes y amenazas que recibe de Marruecos». Aduh insistió en su comparecencia en que la comunidad internacional debe presionar a Marruecos para que cumpla las resoluciones de la ONU y convoque el referéndum de autodeterminación.
Con respecto a las acusaciones del Gobierno marroquí en las que afirma que en el campamento desalojado había milicias y delincuentes, Aduh aseguró que «son alegaciones falsas porque allí todo lo que entró pasó los controles marroquíes».
El presidente Valcárcel, que anunció que va a promover que todos los ayuntamientos de la Región hagan mociones para condenar la violencia en el Sáhara, destacó la vinculación histórica y emocional con el pueblo saharaui, y dijo que, «sin estar en contra de nadie, el Gobierno de Murcia apoya a quienes sufren injusticias», por lo que reclama el cumplimiento de los derechos humanos y de la legalidad internacional y condena la violencia que está sufriendo el pueblo saharaui. El presidente del parlamento saharaui agradeció el apoyo que recibe de Murcia y del resto de España porque «este apoyo nos ayuda a levantar nuestra moral para seguir aportando soluciones pacíficas, aunque el ambiente hace que cada vez más gente piense lo contrario».
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