Conflicto del Sahara: ´Al ser el único saharaui que iba en el convoy lo bajaron y lo atropellaron dos veces´

Fuente: laopiniondemurcia.es (12/11/2010)

El hermano de Baby Hamday Buyema, saharaui con nacionalidad española y con familia en Murcia que murió en El Aaiún durante el ataque de fuerzas marroquíes, relató anoche a este periódico los detalles de cómo se produjo la muerte de su familiar. Lahmad aseguró que fue asesinado por la Policía marroquí tras bajarlo de un autobús en el que se dirigía a su trabajo en unas minas de fosfatos.

Lahmad, que vive en Alicante desde 1999, conoció la trágica noticia pocas horas después de la muerte de su hermano. «Eran las once de la mañana –relató Lahmad– cuando el autobús que llevaba a la mina a mi hermano y a sus compañeros fue parado en una calle de El Aaiún por policías del cuerpo especial GUS (unidad creada expresamente para el Sahara Occidental). Al ser el único saharaui que viajaba en el convoy lo bajaron y lo atropellaron dos veces, la última para rematarlo». Este brutal atropello fue presenciado por un grupo de saharauis que trataron de socorrerle sin éxito, ya que además la ambulancia tardó cinco horas en llegar.
L
a tragedia de la familia de Lahmad no acaba con el asesinato de Baby porque otro hermano que vive en El Aaiún fue detenido el pasado domingo y no han vuelto a tener noticias de él. De momento, Lahmad no deja de estar en contacto desde Alicante con su familia y con la viuda de su hermano asesinado, que tenía un hijo de 4 años y una hija de 18 meses.

Su intención es viajar a El Aaiún para arreglar el funeral de su hermano, aunque pretende buscar el apoyo del ministerio de Asuntos Exteriores para asegurarse una protección ante posibles represalias.

Lahmad reconoce que tiene «miedo», igual que su familia, pero subraya que tanto los suyos como la población saharaui de El Aaiún aguantarán «les cueste lo que les cueste, incluso la vida».

Baby Hamday Buyema cursó estudios de técnico de electricidad en el Sáhara y en la universidad de Rabat, por lo que su cualificación eran muy alta. De hecho, cuando realizó la prueba de acceso para el trabajo que desempeñaba en la mina de fosfatos –uno de los empleos mejor pagados en la zona– fue el único saharaui en superarla, según recordaba anoche su hermano.