Musulmán reformista afirma que prohibir por ley el velo "no es sano" porque fomenta "la enemistad" con los musulmanes

Fuente: ecodiario.es

Uno de los reformadores contemporáneos del Islam más importante a escala mundial, el profesor Nasr Hamid Abu Zayd, manifestó que prohibir por ley el velo islámico "no es sano" porque fomenta "la enemistad con los musulmanes".

En entrevista con Europa Press con motivo de la publicación de su libro en España 'El Corán y el futuro del Islam' (Herder, 2009), señaló que estas situaciones "deberían solventarse mediante una negociación". En cualquier caso, dijo que el Islam no obliga a las mujeres a llevar el velo, aunque los musulmanes sí lo consideren así.

En el caso de las niñas, Abu Zayd se mostró partidario de prohibir que las menores por debajo de una determinada edad lo vistan. "Debería ser sólo para adultos, porque en una niña pequeña comprendemos que la fuerza la familia, y no comprendo la lógica subyacente para hacerlo así", agregó.

En este sentido, explicó que llevar el velo tiene que ver con el atractivo sexual y, por este motivo, mostró su sorpresa ante la posibilidad de que una menor lo lleve. "Una niña no tiene atractivo sexual, a no ser que vivamos en una sociedad de locos", agregó.

Ante las agresiones que sufre la mujer en el mundo islámico, el experto recalcó en concreto que algunos encuentran en el Corán "apoyo para pegar a la mujer" y reivindicó que "no se puede llegar a esta conclusión". "Hay que leer el Corán teniendo en cuenta el contexto global y específico", añadió.

"MAHOMA NUNCA PEGÓ A UNA MUJER"

Así, defendió su postura señalando que el profeta Mahoma "nunca pegó ni levantó la voz a sus mujeres", aunque, según Abu Zayd, "le daban bastante la lata". En este sentido, dijo que Mahoma al mantener esa actitud, o al prohibir a su yerno que tuviera más mujeres, "no iba contra el Corán" Por ello, reiteró que la necesidad de que el Corán se lea "teniendo en cuenta los significados y que la familia está basada en la pasión, responsabilidad, y tranquilidad".

Por otra parte, apuntó que los musulmanes piensan más "en el miedo al castigo que en la esperanza de la recompensa" y justificó esta creencia en los regímenes totalitarios en los que viven. "Los ciudadanos tienen miedo y esto se refleja en lo que imaginan sobre lo divino. Hay que abrir la conciencia de los musulmanes", sentenció.

Además, negó que la rama fundamentalista sea "una fuerza dominante" en el Islam, sino "la voz más alta". "En los países encontramos otra realidad y vemos que los musulmanes están tratando de vivir sus vidas de forma pacífica". Con todo, apostó por "deconstruir" las escuelas fundamentalistas.

En el caso de la poligamia, Abu Zayd dijo que si se pregunta a una mujer en Egipto por sus derechos ninguna quiere que su marido tenga otra mujer. "Eso no significa que no sean buenas musulmanas, es un sentimiento humano", agregó. En este sentido, hizo especial énfasis en la influencia de la poligamia en los hijos. "Cuál sería el efecto psicológico", se preguntó.

Finalmente, añadió que un futuro desarrollo económico e industrialización de los países musulmanes facilitaría la emancipación de la mujer por la necesidad de su incorporación al mercado de trabajo y mejoraría la situación con respecto a sus derechos.

SE PUEDE SER EUROPEO Y MUSULMÁN

Sobre el papel de los musulmanes en Europa, el profesor explicó que "no hay contradicción entre ser ciudadano europeo y musulmán". En su opinión, es compatible obedecer la ley y vivir de acuerdo a los valores espirituales del Islam. Eso sí, Abu Zayd reiteró que los musulmanes que vengan a vivir a Europa deberán regirse por la legislación de la zona. "Si quieren vivir de acuerdo a sus propias tradiciones, que vuelvan a su país", sentenció.

En este sentido, destacó la necesidad de un diálogo entre las comunidades islámicas y la sociedad en general, al tiempo que reconoció que los musulmanes en Europa, como cualquier ciudadano, pueden intentar cambiar la ley a través de procedimientos democráticos. Sin embargo, no vio claro que exista un modelo de Islam a la europea, porque, en su opinión, la religión islámica es "un fenómeno global". Así, calificó de "utópicas" a las personas que buscan un Islam de estas características.

En otro orden de cosas, Abu Zayd manifestó que con la publicación de su libro pretende, entre otras cosas, "deconstruir la imagen de fundamentalismo que tiene el Islam" en Occidente y transmitir principalmente a la población musulmana que "no se puede entender el Islam simplemente leyendo y aplicando literalmente el Corán".