Fuente: La Opinion (28/10/2008) La Policía ha incrementado la vigilancia en el barrio después de los enfrentamientos producidos en las últimas dos semanas
Después de los incidentes de las últimas dos semanas entre ciudadanos inmigrantes y españoles en el barrio de Los Rosales de El Palmar, la Policía Nacional decidió incrementar la vigilancia en la zona desde la noche del pasado domingo para que estos no se vuelvan a repetir.
Hace dos días un grupo de unos doscientos marroquíes se congregó en la puerta del domicilio de la familia de 'Los Mudos', ya que, como defienden los magrebíes, seis jóvenes, algunos de ellos miembros de la citada familia, pegaron una paliza a un compatriota de sólo 14 años de edad, "y ya no vamos a consentir que nos hagan nada más". En la reyerta del domingo los magrebíes lanzaron piedras contra las unidades policiales y se produjeron varios destrozos en vehículos y comercios. Por tanto, la Policía Nacional tuvo que desplazar al barrio a la Unidad de Prevención y Reacción (UPR) para contener los enfrentamientos, algo a lo que se comprometieron los marroquíes después de hablar con los agentes.
La mayor presencia policial en la zona se produce después de este disturbio en la calle Los Álamos además de otros enfrentamientos ocurridos en las últimas dos semanas en el barrio entre inmigrantes y españoles. "Este aumento de la vigilancia es algo que se pedía desde hace tiempo", como destacó el presidente de la Asociación de Vecinos de Los Rosales, Juan Luis Jiménez. "Estamos cansados de esta situación y pensamos que es evitable. Nosotros buscamos una convivencia digna, da igual el color de la piel", explicó Jiménez.
De la misma opinión es Mohamed, uno de los magrebíes residentes en la zona: "Todos somos personas y no queremos que haya diferencia entre razas. Exigimos el mismo respeto o más del que nosotros tenemos a los españoles". También se mostró duro con 'Los Mudos' -que se trasladaron a casa de unos familiares después del enfrentamiento del pasado domingo-, que, afirmó, han hecho que la situación sea insoportable, por lo que espera que no regresen al barrio, "porque si la Policía deja que vuelvan será responsabilidad suya lo que pase. Desde que pegaron al chico el domingo no vamos a perdonar que se metan con nosotros".
Por otra parte, vecinos de etnia gitana del barrio se mostraron muy enfadados ya que afirman que no tienen nada que ver con los incidentes y que ellos mantienen una buena relación con los inmigrantes: "La familia que empezó esto son payos, no gitanos", destacó una mujer que añadió que ayer fue un día más tranquilo debido en parte a la presencia de los agentes policiales. No obstante, los criticó "por no actuar en ocasiones anteriores como deberían".
Mientras, seis vecinos del barrio de El Palmar fueron citados ayer para prestar declaración en la Comisaría sobre los incidentes del domingo.
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