Fuente: Nueva Linea (22/04/2008)
Mohamed Reda El-Qady, secretario de la Unión de Comunidades Islámicas (UCIDE) en Murcia, asegura que los que ven el islam como una religión conflictiva “no la conocen”
Mohamed Reda El-Qady es el secretario de UCIDMurcia, una organización que representa en la Región a La Unión de Comunidades Islámicas de España (UCIDE). Nacido en Egipto hace 68 años, está casado con una española y es doctor en Pensamiento Islámico por la Universidad de Murcia. Llegó a España en 1969 para terminar sus estudios, y decidió quedarse aquí. Fue profesor de árabe de la Escuela Oficial de Idiomas. “Ahora, que soy menos joven, me dedicó principalmente a traducir libros”.
- ¿Por qué decidieron formar UCIDE en Murcia a pesar de que ya existía otra agrupación de comunidades islámicas?
El otro grupo que hay en Murcia sólo era local, cuando llegamos nosotros, y no podían tener la misma fuerza que una organización que cubre toda España. Ahora están intentando formar parte de la Comisión Islámica, que son los que representan a los musulmanes ante el Gobierno. UCIDE tiene 40 años y delegaciones en todo el territorio nacional, pertenecemos a la Comisión Islámica, y no tenemos la necesidad de registrarnos como comunidad ante el Estado. Podemos, por tanto, recibir ayudas estatales.
- ¿Tienen algún proyecto en común con la FIRM?
Todavía no, pero trabajamos en la misma dirección: mejorar la situación de los musulmanes y apoyar a la comunidad islámica. Nosotros les invitamos a nuestros actos, y ellos a nosotros a los suyos. Además, vamos a rezar a sus mezquitas.
- ¿Tienen previsto abrir alguna mezquita?
Vamos hacer un centro islámico para dar conferencias, actividades culturales islámicas y darnos a conocer un poco más. Ahora lo más urgente es que la gente sepa cómo es el islam, cómo piensan los musulmanes: que la mayoría no somos terroristas y fanáticos.
- Pero en la última reunión que celebró UCIDE trataron el tema de la apertura de nuevas mezquitas en Murcia.
Allí hablamos de que los creyentes de la Región preferimos comprar un terreno, que sea propiedad de la comunidad musulmana y edificarlo con nuestro esfuerzo. El dinero para construirlas proviene de ayudas voluntarias. Las subvenciones no son para adquirir locales, sólo las queremos utilizar para material, gastos de luz, agua, etc.
- ¿Han recibido presiones los propietarios de los centros de oración para que les retirarán el alquiler de los locales?
Simplemente los propietarios no querían que fuera para una mezquita, por la mala fama que tienen. Se piensa que esos lugares son un escondite de terroristas o una fábrica de criminales; por eso asustan un poco a la gente.
- ¿Cómo controlan que no haya infiltraciones de grupos que predican ideas el terrorismo e ideas integristas en los centros de oración?
Estamos muy vigilantes en ese aspecto. Somos los primeros interesados en corregir esa fama que nos han dado los que hicieron lo de Madrid. Hay que acabar con cualquier intención de provocar violencia. No podemos permitir que hagan barbaridades de ese tipo. El integrismo sólo se produce cuando hay un lavado de cerebro profundo, porque nuestra religión prohíbe el suicidio y el asesinato.
- ¿Sufrieron islamofobia tras los atentados del 11-M?
Después de lo que pasó algunos tuvieron problemas, sobre todo los que llevan barba y el atuendo típico de los países árabes. Hubo algunos insultos o agresiones, pero no fue la tónica general.
- ¿Cuál es el prejuicio más extendido sobre el islam?
El integrismo es, sin duda, la plaga más importante; el fantasma que ha amargado la vida a mucha gente, y que ha sido alimentado por los americanos. Un error de Estados Unidos; crean monstruos que luego vuelven para morderles la mano.
- ¿Qué les diría a quienes aseguran, como por ejemplo, un político de Holanda que ha presentado recientemente un polémico documental, que el Corán es un libro fascista y violento?
Que lo conozcan, igual que yo conozco la Biblia, porque la he leído varias veces. Juzgar sin saber es la completa ignorancia. Si conociesen mi religión, se darían cuenta de que el mensaje esencial del islam es el mismo del cristianismo: amar al prójimo como a uno mismo y a Dios sobre todas las cosas.
- ¿Cuál es la interpretación real de la Yihad o guerra santa?
La guerra santa mayor es luchar contra uno mismo; dominar y controlar a uno mismo es la guerra más grande. Después la guerra santa, en sentido común, es defender a tu país, a tus bienes y a tu vida de los agresores, y nada más. No es atacar, el islam es una religión pacífica. Y está en todo el mundo por convencimiento y conocimiento, y no por la fuerza.
- En Águilas han puesto en marcha talleres para desterrar los prejuicios sobre el islam entre los escolares ¿Cree que son necesarias más iniciativas de este tipo?
No es preciso hacer talleres y cosas de ese estilo. Lo que tenemos que hacer es abrirnos nosotros, darnos a conocer, porque es nuestra obligación. Los cristianos tienen que abrirse un poco también: intentar saber cómo somos, cómo pensamos, como vivimos, y no tener los tabúes de siempre. La separación entre moros y cristianos es un tópico que ya pasó a la historia. Estamos en la época de la información y es muy fácil conocer al otro, sólo es una cuestión de voluntad.
- Deduzco de sus palabras que usted considera que hay muchos musulmanes que se muestran reacios a integrarse en la sociedad.
Hay algunos que son muy conservadores y no quieren mezclarse con los demás. Pero la mayoría somos más sociables y convivimos como todo el mundo, porque estamos totalmente integrados en la sociedad.
- Han reclamado que se pueda utilizar el velo en la fotografía del DNI. ¿Han recibido ya alguna respuesta del Ministerio del Interior en ese sentido?
Lo van a autorizar, porque es absurdo obligar a enseñar la oreja y el pelo, cuando la cirugía estética puede cambiar todo el cuerpo. Además, siempre lo llevan porque es una parte de la identidad de su persona, de su forma de ser musulmana, no se lo ponen por obligación. Lo que se puede hacer es buscar otra forma más práctica de identificación.
- ¿Por qué defienden que el pañuelo islámico no discrimina a la mujer?
Discrimina a la mujer cuando tiene que ponérselo por obligación. La mayoría de mujeres de mi familia en Egipto no lleva el hiyab. Mi sobrina, que es profesora de la Facultad de Medicina en el Cairo, empezó a utilizarlo cuando empezó a trabajar y decidió ponérselo, y ni es una persona ignorante, ni la obligaron.
- ¿La entrada de Turquía en la UE favorecería la alianza de civilizaciones que defiende el presidente Zapatero?
Turquía es un país musulmán pero piensa de manera diferente. Primero debe librarse del autoritarismo y del fanatismo, eliminar la pena de muerte y lograr la liberación de la mujer. Tiene que acercarse un poco más a la sociedad moderna y convertirse en un país europeo. Querer ser europeo con pensamiento medieval no vale. Su problema para entrar en la Unión Europea no radica, en absoluto, en que se trate de un país de población mayoritariamente musulmana. El islam no es incompatible históricamente con la democracia, como dicen algunos. Lo primero que hace el islam es el consenso. Los líderes, después del profeta, eran elegidos por consenso de la comunidad, que debían aceptarlos o quitarlos.
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