La Policía Nacional detiene a decenas de inmigrantes irregulares al realizar una gran redada en Torre Pacheco

Fuente: La Verdad (28/6/2008)

Cientos de extranjeros, en su mayor parte magrebíes, fueron identificados en tres zonas del casco urbano para comprobar si tenían la documentación en regla.

No se estaba rodando una película sobre las peripecias de las brigadas especiales de policía. Era pura realidad. La tarde de ayer, Torre Pacheco no sólo aparentaba ser una ciudad con ley, sino una ciudad con toda la ley del mundo. Y es que una operación especial de la Brigada de Extranjería se saldó con cientos de inmigrantes identificados y con más de un centenar de ellos, según las primeras estimaciones, conducidos a dependencias policiales por no tener su documentación en regla. Cerca de 60 agentes de Policía Nacional, pertenecientes a las brigadas de Seguridad Ciudadana y de Extranjería y auxiliados por Policías Locales, se distribuyeron por las calles del municipio para llevar a cabo esta importante operación.

Una avenida cortada

Todo se inició a media tarde. Sin previo aviso, un coche policial cortó la Avenida de la Estación, el principal ramal del pueblo, y por una de las calles adyacentes llegó un autobús de grandes dimensiones con los símbolos que identifican a la Policía Nacional. Descendió del mismo un amplio grupo de miembros de este cuerpo e irrumpieron en la mezquita, que se ubica en un bajo de esta avenida.

En pocos segundos, y como si de un volcán que ha entrado en erupción se tratara, empezaron a salir en tromba sus ocupantes. «¿Los papeles!», exigían los policías, acompañado de un imperativo «¿no te muevas de ahí!», que los dejaba clavados en la acera. Una estampa que muy pronto empezó a ser contemplada por decenas de vecinos que, atónitos, apenas podían creer lo que estaban presenciando.

«Parece la serie ésa de la tele», comentaba una vecina al ver tanto revuelo. Mientras tanto, en un locutorio de la plaza Calvo Sotelo se desarrollaba una escena bastante similar: los policías llegaban de repente y evacuaban a todos los que se encontraban en el interior, para seguidamente comenzar a exigir la documentación a cualquier extranjero que pasara por la calle.

Semblantes serios
El semblante de los policías era serio. Pero más serio y, sobre todo, bastante más preocupado, era el que mostraban los cientos de inmigrantes que esperaban en las distintas calles del municipio, rodeados de policías, sin saber muy bien qué les iba a pasar. Unos, con toda la documentación en regla que sin miedo mostraban a los agentes; muchos otros, sin papeles que enseñarles y con un futuro poco prometedor.

Fueron necesarios dos viajes del autobús para conducir a dependencias oficiales a más de cien inmigrantes indocumentados, la mayoría de origen marroquí. Su primer destino era el edificio de soberanía que se encuentra junto al Consistorio. Toda esa calle también fue cortada al tráfico.
Allí les esperaba un largo periodo de papeleos y toma de declaraciones, para después ser conducidos a instalaciones policiales. Al final de todo, y como negra promesa de futuro, una más que probable orden de repatriación.

Las principales calles de Torre Pacheco permanecieron cerradas por la Policía Nacional durante toda la operación, que duró más de cuatro horas y que creó una gran expectación entre los vecinos. «Es un alivio que los policías hagan esto, porque nos da más seguridad», comentaba una vecina de la avenida de la estación. No eran pocos los que pensaban así.