Fuente: El Faro (18/1/2009)La Asociación de Solidaridad con el Pueblo Palestino, que convocaba la manifestación para pedir el alto el fuego en la zona, cifró la participación en 20.000 personas, aunque la Policía Nacional la redujo a unas 5.000
La unión de toda la sociedad murciana e inmigrante para reclamar el alto el fuego en Gaza y acabar así con el calificado por algunos de los asistentes como “genocidio israelí” fue la característica general de la manifestación que colapsó ayer el centro de la ciudad de Murcia y a la que asistieron más de 5.000 personas según la Policía Nacional, aunque según los organizadores del evento, la Plataforma de Solidaridad con el Pueblo Palestino, fueron más de 20.000 los murcianos e inmigrantes que se sumaron a estas protestas.
‘¡Paremos el genocidio del pueblo palestino!’ decía una de las pancartas que los manifestantes portaban, y todos ellos coreaban al unísono “¿Dónde está la ONU?” o “No es una guerra, es un genocidio”. Para ilustrar la protesta, algunos de los asistentes portaron un ataúd en donde se llevaba a la ONU, o muñecas ensangrentadas como símbolo de las miles de vidas que se han perdido como consecuencia de los bombardeos israelíes.
De hecho, el presidente de la Asociación de Solidaridad con el Pueblo Palestino de Murcia, Pedro Marset, exigió que el Gobierno central tome medidas junto con la ONU para interrumpir las relaciones diplomáticas y pedir que haya un castigo “a estos crímenes contra la humanidad”.
En este sentido, Marset indicó que no es suficiente un alto al fuego, ya que “aún así continuaría la presencia de los tanques y la amenaza contra la población palestina”. Marset también comparó esta situación actual en Oriente Próximo con lo acaecido en la Segunda Guerra Mundial y el exterminio nazi.
Del mismo modo, este profesor de la Universidad de Murcia afirmó que la respuesta de los ciudadanos a esta protesta “es una muestra fehaciente de la conciencia humana y solidaria, tanto de creyentes como de no creyentes, de cristianos y de musulmanes, de la gente de Murcia, en favor de la paz en Oriente Próximo”.
Por su parte, el presidente de la Federación Islámica de Murcia, Mbarek Demouche, que era uno de los que encabezaba la manifestación, propuso que el Gobierno central y la comunidad internacional “tienen que luchar contra el terrorismo, un proyecto común que tenemos en todo el mundo”, y consideró que lo que está pasando en Gaza “es ilegal e ilegítimo”.
Asimismo, Demouche exigió la “apertura de los corredores para poder salvar todo lo que se pueda a nivel sanitario y alimentario”, así como la salida urgente del ejército israelí. El presidente de esta Federación consideró que lo que está pasando en Gaza “es fascismo”, y opinó que “Palestina debe luchar también por sus derechos”.
Los manifestantes mostraron también su repulsa por los ataques a Gaza entonando canciones en árabe que poco después eran cantadas en español. Tanto niños como mujeres las coreaban conjuntamente y protestaban así contra los continuos ataques a esta zona, pidiendo el final de los mismos y la salida de Gaza del ejército israelí.
Tras atravesar el centro de Murcia, los protestantes se dirigieron a la Delegación del Gobierno, donde el catedrático de Filosofía de la UMU, Francisco Jarauta, leyó un manifiesto.
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